El sol y el calorcito nos hacen sentir bien y en cierta forma nos producen una sensación de felicidad. Eso es muy bueno y es la parte positiva del sol. En eso estamos de acuerdo.
Pero como sabes hay que tomarlo con precaución, porque el sol tiene su parte oscura. Los efectos acumulativos de la exposición al sol nos ponen en mayor riesgo de daño celular, aparición de arrugas precoces, manchas de la edad, queratosis actínica y cáncer de piel, incluyendo el melanoma, el tipo de cáncer de piel más grave.
¿Cuál es la cara oscura del sol?
- Piel Bronceada
La piel bronceada gusta, pero ese color dorado o moreno que se ve es el resultado de lesiones en la epidermis, la capa superior de la piel. La exposición a los rayos (UV) ultravioleta del sol acelera los efectos del envejecimiento y aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de piel. Para prevenir el daño del sol, es muy importante usar protección solar con factor 30 o mayor.
- Las quemaduras de sol (de primer grado)
La quemadura es el daño de la piel de los rayos UV del sol. La mayoría de las quemaduras de sol producen enrojecimiento, calor al tacto y dolor leve, que afecta sólo a la capa externa de la piel (quemaduras de primer grado). Las quemaduras de sol suelen aparecer a las pocas horas de haber tomado sol y pueden tardar varios días o semanas en desaparecer. Los analgésicos como la aspirina o el ibuprofeno, compresas frías, aloe o cremas hidratantes pueden reducir el dolor y el malestar.
- Las quemaduras de sol (de segundo grado)
Una quemadura de segundo grado es la que daña las capas profundas de la piel y las terminaciones nerviosas. Suelen ser más dolorosas y tardan más tiempo en curarse. Se caracterizan por enrojecimiento, hinchazón y ampollas. Si se forman ampollas, no las rompas – son una fuente de humedad y protección. Romper las ampollas puede conducir a la infección. Es mejor que acudas al médico si tienes una quemadura de sol con ampollas.
- Arrugas
Los rayos del sol hacen que la piel envejezca antes de lo que debería. Más del 80% de los signos de envejecimiento de la piel en los adultos son el resultado de tomar mucho el sol durante años. La luz ultravioleta del sol daña las fibras de la piel llamada elastina. Cuando estas fibras se dañan, la piel comienza a ceder, estirar, y pierde su capacidad de volver a su lugar después de los estiramientos.
- Piel Con Manchas
El exceso de sol también causa manchas oscuras o la pigmentación de la piel. El melasma (o cloasma) se caracteriza por parches de color marrón claro o marrón oscuro en las mejillas, nariz, frente y barbilla.
- Manchas de la edad (léntigos)
Las manchas en la piel por la edad, tambien conocido como lentigo, son manchas marrones, pequeñas y redondeadas, parecidas a gotas, que pueden aparecer en la cara, el escote y las manos. Una vez que aparecen, tienden a ir aumentando en número y tamaño.
- Queratosis actínica (queratosis solar)
Estos pequeños parches escamosos, rojos, marrones, o del color de la piel, causados por el exceso de exposición al sol ocurren comúnmente en la cabeza, el cuello o las manos, pero se pueden encontrar en otro lugar del cuerpo.
Consejos
La mejor manera de prevenir las quemaduras solares, arrugas prematuras, cáncer de piel y otros efectos dañinos del sol es:
- Evitar el sol, especialmente entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, cuando los rayos del sol son más fuertes.
- Si no puedes, aplícate un protector solar con un factor de protección 30 o superior (¡no olvides los labios, las orejas y las axilas!.
- Usa un sombrero y gafas de sol cuando vayas a pasear, a la playa, a la piscina.
- Si notas cambios en la piel, como que el aspecto de un lunar cambia o una llaga que no se cura, consulta a tu médico inmediatamente.